Hasta ahora, las compañías siempre han pensado en los clientes, en la importancia de su satisfacción, en ofrecer un buen servicio, y en el tradicional “los clientes siempre tienen la razón”. Ahora es el momento de dar un paso más y dejar de pensar EN el cliente para pensar COMO el cliente.
Los clientes confían más en la opinión de otros usuarios o consumidores que en la comunicación que realiza la propia marca. Exigen a las empresas movilidad, agilidad y personalización. No admiten falta de transparencia, pero sí perdonan determinados errores, siempre que la empresa actúe con proactividad, claridad, compromiso de ayuda y coherencia.
Por tanto, resulta primordial profundizar en el conocimiento de las personas. Ahora más que nunca, las empresas tienen que escuchar a los clientes y empleados para conocer sus expectativas, necesidades, preferencias y objetivos. Es el momento de invertir en Experiencia de Cliente.
Debemos aprender a reinventarnos de manera más rápida, a mirar la realidad desde otro prisma, a vivir y sentir la relación empresa-cliente como si éste fuera un ser querido.
En The Customer Spirit, ayudamos a transformar la visión de la compañía. Nunca es tarde. Solo hay que asumir como nuestro, el espíritu del cliente.